Ya sé que es muy largo, atz, pero por su interés para los pajarólogos locos reproduzco la Nota de Prensa (Fuente original BirdLife International) sobre la gripe aviar.14 de octubre de 2005
El virus H5N1 parece estar extendiéndose, con brotes recientes en China, Kazajstán, Mongolia, regiones de Rusia y algunos países alrededor del mar Negro, con el inicio de la expansión a través de Asia desde finales de 2003. No está totalmente claro cómo se transmite la enfermedad, pero existe la posibilidad de que las aves acuáticas migradoras estén implicadas. Hay numerosas cepas de influenza aviar (al menos 144), muchas de las cuales están presentes en las aves silvestres en pequeñas proporciones. La mayoría de estos virus de las aves silvestres son benignos.
Los virus de influenza aviar altamente patogénicos pueden causar grandes mortalidades en las aves de granja, pero son muy raros en aves silvestres. H5N1 es altamente patogénico pero no se ha registrado nunca en aves silvestres antes de los brotes más recientes en el SE de Asia, Rusia y países alrededor del mar Negro. Posiblemente se ha originado en aves domésticas a partir de la mutación de subtipos de baja patogenicidad y posteriormente se ha pasado desde las aves de granja a las aves silvestres.
La transmisión se produce en las granjas de aves domésticas, debido a la densidad de aves y al consecuente contacto directo con las heces y otras secreciones a través de las cuales el virus puede transmitirse. Los métodos ganaderos empleados en el SE Asia, donde se permite a las aves de corral mezclarse libremente con las aves silvestres, especialmente las aves acuáticas, hacen que la transmisión a las aves acuáticas migradoras sea más fácil, y ha supuesto varios casos de muerte.
No hay evidencias de que los casos de infecciones en humanos por H5N1 procedan de las aves silvestres. Los casos en humanos han ocurrido en personas que trabajaban directamente en contacto con las aves de granja. El riesgo para la salud humana por las aves silvestres es extremadamente bajo, y puede ser minimizado evitando el contacto con aves enfermas o muertas. Sin embargo la posibilidad de que este virus pueda trasformarse en uno que pueda transmitirse de humano a humano. Si esto ocurre, es más probable que suceda en el SE de Asia, desde donde se extendería rápidamente al resto del mundo.
La situación está evolucionando rápidamente día tras día, y nuestra posición sobre esta enfermedad y las medidas de control continuarán evolucionando con la aparición de nuevos datos. Los puntos a continuación indicados se basan en la mejor información de la que disponemos a 14 de octubre de 2005:
1. Los casos más recientes sugieren que las aves migradoras pueden haber trasmitido la enfermedad entre países o regiones. Aunque este enlace aún no ha sido comprobado, no podemos olvidar esta posibilidad. Los movimientos de aves de granja, otra de las posibles rutas de transmisión, se han visto ampliamente implicados en la expansión de la enfermedad en el SE de Asia.
2. No ha habido casos registrados de la transmisión de la enfermedad entre aves silvestres infectadas y los seres humanos. La variedad de virus H5N1 no es actualmente contagiosa entre los seres humanos, y la mayoría de los casos humanos hasta la fecha se han asociado al contacto cercano con aves domésticas de corral infectadas. El riesgo de un ser humano de contraer la enfermedad de un ave silvestre es remoto, a menos que hubiera contacto cercano excesivo con las aves infectados y sus secreciones.
3. La matanza de aves silvestres difícilmente puede para la dispersión de la enfermedad y es extremadamente difícil de llevar a cabo. Este punto de vista se comparte con la Organización Mundial de la Salud, la FAO, Organización Mundial para la Salud Animal y el gobierno de Gran Bretaña. Efectivamente, la matanza pueden potencialmente hacer que la situación empeore al dispersar a los individuos infectados y al estresar a las aves sanas, haciendo que sean más propensas a dispersarse. Lo que es más, podría desviar recursos de las medidas de control más importantes.
4. Las técnicas más eficientes del control implican mejoras en la bioseguridad, sobre todo de la industria de las aves domésticas, con el fin de reducir la probabilidad del contacto entre éstas y las aves silvestres o las fuentes de agua infectadas. A esto habría que añadir la completa erradicación de los grupos infectados de aves domésticas en los focos de enfermedad. Otras medidas que deben ser consideradas incluyen la consolidación de la vigilancia para la enfermedad, y controles más estrictos en mercados de aves domésticas y transporte. Tales medidas se deben cumplir en todo el mundo. Los países que actualmente están libres de la enfermedad deben considerar prohibir las importaciones de las aves domésticas, aves silvestres como mascotas así como para los productos comerciales como plumas, carne fresca, etc., de regiones afectadas. Prevenir el acceso público a los sitios infectados es también claramente una medida de prevención.
5. Es importante destacar que en los debates sobre las consecuencias de la influenza aviar se debería diferenciar entre los problemas reales causados por la expansión de la enfermedad entre las poblaciones de aves, especialmente en la industria avícola, y los riesgos teóricos de una pandemia en humanos, que podría no suceder.
6. Reconocemos por completo el potencial de una pandemia humana si la cepa del virus incrementa su transmisibilidad con la mutación o recombinación, originando una transferencia de la enfermedad de humano a humano. También reconocemos el impacto que la situación actual está teniendo en las economías locales forzadas a realizar sacrificios de aves domésticas. Hay que destacar la necesidad de utilizar los recursos limitados disponibles en aquellos lugares y actividades donde la gente, el ganado y la fauna tienen un mayor contacto.
7. Además del impacto de la enfermedad en la economía y del posible impacto para la salud humana, hay implicaciones potenciales para la conservación de las aves. Por ejemplo, se estima que entre el 5% y el 10% de la población del mundo de Ánsar Índico desapareció en el brote reciente en China.
Notas:
La Organización Mundial de la Salud (OMS), la Office International des Epizooties (OIE) y la Organización Mundial para la Alimentación y la Agricultura (FAO) coinciden en que "el control de la influenza aviar en poblaciones silvestres de aves no es factible y no debe ser tratada." (
www.who.int/csr/don/2005_08_18/en/index.html )
Influenza aviar y aficionados a la observación de aves
Durante la segunda mitad de septiembre, los representantes del RSPB (BirdLife en el Reino Unido) y otras ONG británicas ornitológicas como BTO y WWT, tuvieron un encuentro con las instituciones estatales británicas más relevantes para aconsejar y poner en conocimiento los últimos datos sobre los orígenes de las aves migradoras invernantes en el Reino Unido, así como las rutas de la migración y su fenología, y las distribuciones de las aves dentro del Reino Unido. La información tiene su origen en parte en el trabajo duro de los voluntarios que trabajan en organizaciones como BTO, WWT, RSPB. Como resultado de esto, la RSPB ha publicado algunas pautas para los aficionados a las aves en lo referente a la enfermedad.